Explore los hitos clave en la lucha contra la MCD, desde los primeros descubrimientos de los betabloqueantes hasta el reconocimiento de sus orígenes genéticos.
La siguiente cronología destaca momentos cruciales como el primer trasplante de corazón, la aparición de medicamentos que salvan vidas y el creciente conocimiento del vínculo hereditario de la MCD.
- 1962 – Se sintetiza con éxito el primer betabloqueante
- 1964 – ¡Nació Greg Ruf! (fundador de la Fundación MCD)
- 1967 – Se realiza el primer trasplante de corazón
- 1975 – Lanzamiento del atenolol (betabloqueante)
- ¡Contraindicado en MCD/Insuficiencia cardíaca!
- 1975 – Total de trasplantes de corazón realizados en Estados Unidos = ¡22!
- 1980 – Primer DAI implantado en un ser humano
- 1984 – La ciclosporina se utiliza en la inmunosupresión de los trasplantes de corazón – mejora la supervivencia
- 1987 – Los inhibidores de la ECA son los primeros fármacos que mejoran la supervivencia de los pacientes con insuficiencia cardíaca.
- 1998 – Se aprueba el uso de carvedilol (betabloqueante) en la insuficiencia cardíaca – mejora la supervivencia
- Mediados de la década de 1990: se establece que la MCD es una enfermedad genética en determinadas familias mediante estudios de pedigrí.
- 2001 – Se demuestra que la TRC (marcapasos biventricular) beneficia a las personas con MCD e insuficiencia cardiaca.
- 2015 – Se aprueba Entresto (inhibidor de la ECA/ARB) para el tratamiento de la insuficiencia cardíaca.
- 2022 – Número total de trasplantes de corazón realizados en Estados Unidos: ¡aproximadamente 43.000!
- Esta cifra incluye tanto los trasplantes cardíacos pediátricos como los de adultos.
- Cabe señalar que esta cifra sigue creciendo cada año, con cifras récord de trasplantes de corazón realizados en los últimos años gracias a los avances de la medicina y al aumento de la donación de órganos.
Desde los primeros pasos en la investigación de betabloqueantes hasta la comprensión de las raíces genéticas de la MCD, estos momentos ponen de relieve los progresos realizados en la lucha contra esta difícil enfermedad. Con la investigación en curso y los nuevos descubrimientos, el futuro se presenta esperanzador en cuanto a mejores tratamientos y, con un poco de suerte, algún día la curación de la MCD.